VisitBritain acaba de soltar un informe con las previsiones del 2025; al parecer, el gasto en turismo se disparará en un 7% respecto al año pasado y llegará a unos 33.700 millones de libras –una cifra que, en la práctica, nos sorprende. También se estima que el número total de turistas crezca en un 5%, sumando alrededor de 43,4 millones de visitantes.
Curiosamente, los viajeros estadounidenses siguen marcando el paso. No es para menos, ya que Estados Unidos se mantiene como el mercado más grande y rentable para el Reino Unido. Este año, se espera que el gasto de los visitantes americanos suba un 9% con respecto a 2024, alcanzando la increíble suma de 6.700 millones de libras. En otras palabras, por cada 5 libras gastadas en territorio británico, aproximadamente 1 proviene de Estados Unidos.
Del otro lado, la recuperación en el este de Asia se da de forma más pausada, casi tímida en términos generales. Sin embargo, en un giro interesante, se prevé que China se convierta en el quinto mercado de origen más valioso; aportará cerca de 1.600 millones de libras a la economía británica, lo cual resulta notable en el contexto actual.
Al mirar más adelante, VisitBritain analiza la competitividad global del turismo y su potencial a largo plazo. Si el ritmo de crecimiento se mantiene –algo que en la mayoría de los casos es la esperanza– el sector podría añadir hasta 4.400 millones de libras extras a la economía del Reino Unido para el 2030, un panorama que muchos esperan ver materializado.
Sir Chris Bryant, el secretario de Turismo, comentó: “Nuestro objetivo es recibir 50 millones de visitantes internacionales en el Reino Unido para 2030”. Por su parte, Patricia Yates, directora ejecutiva de VisitBritain, destacó que el turismo suma, en promedio, un 7% al crecimiento económico anual y remarcó lo competitivo que resulta a nivel global. Ella añadió, de forma algo directa, que la campaña internacional “Starring GREAT” se lanzó justamente para apoyar el ambicioso plan del Gobierno hacia esos 50 millones anuales.
Por último, el Reino Unido centra sus esfuerzos en mercados en auge –como Australia, Estados Unidos, ciertos países europeos y las naciones del Consejo de Cooperación del Golfo– ya que, según algunas investigaciones, 9 de cada 10 visitantes potenciales se mueren de ganas de recorrer locaciones de películas y series durante su estancia, lo que añade otro matiz interesante a esta estrategia de crecimiento.