La pandemia de Covid-19 está teniendo un efecto significativo en la industria del turismo en todo el mundo, ya que las vidas y los negocios de millones de personas en todo el mundo están siendo afectados por esta crisis sin precedentes.
Debido a la gran dependencia del sector turístico, Tailandia está pasando por grandes apuros debido a la drástica caída de visitantes en los últimos meses.
Fuerte aumento de las búsquedas
Sin embargo, hay algunos indicios de que se avecinan tiempos mejores para el turismo tailandés. Según Airbnb, se ha producido un fuerte aumento de las búsquedas de estancias en Tailandia en las últimas semanas desde el anuncio de la reapertura del país para los visitantes totalmente vacunados de 63 países.
La conocida plataforma de alquileres detalla que las búsquedas de clientes internacionales para estancias en Tailandia en los próximos seis meses se han duplicado con respecto a hace un año, según los datos de la penúltima semana de octubre.
La Isla Phuket es la más popular, los turistas estadounidenses son los más interesados
Según los datos, la popular isla de Phuket sigue siendo el principal destino del país para los clientes internacionales, junto con Bangkok, Koh Samu, Pattaya y Chiang Mai.
Los 10 primeros países de origen de las búsquedas son Estados Unidos, Rusia, Alemania, Reino Unido, Francia, Corea del Sur, Australia, Canadá, Suecia y Suiza.
Nuevo estándar de turismo
La Autoridad Turística de Tailandia (TAT por sus siglas en inglés) ha lanzado una nueva campaña llamada "Amazing Thailand, Amazing new chapters" para promocionar el sector el próximo año, haciendo hincapié en la nueva normalidad, la salud y la seguridad.
En esta campaña, las autoridades han pedido que se diversifique el público objetivo, sugiriendo que se apunte tanto a los mercados cercanos, como los países de la ASEAN, como a los mercados de larga distancia, como Estados Unidos, Europa y Rusia.
Además, el gobierno tailandés pretende crear un sector que haga hincapié en la calidad y no en la cantidad, lo que supone un cambio radical en el enfoque del sector turístico tailandés.
En otras palabras, la idea es atraer a un menor número de turistas ricos en lugar de millones de "baja calidad". Sin embargo, no todo el mundo está encantado con esta nueva estrategia.
De hecho, la mayoría de las partes interesadas del sector están en contra de esa política. Según sus estimaciones, centrarse en los turistas de clase alta puede aportar dinero a los hoteles de lujo, pero no beneficiará a la mayor parte del sector ni al "ciudadano tailandés promedio".
Así pues, está por ver cómo se desarrollará el turismo tailandés en el futuro, pero lo que es seguro es que el gobierno tendrá que encontrar un discurso común con las partes interesadas para que el país vuelva a estar entre los primeros destinos del mundo.