El objetivo es digitalizar completamente el proceso de expedición de visados para 2025 para los ciudadanos de los 102 terceros países sujetos a la obligación de visado de corta duración.
"La Comisión propone ahora digitalizar el procedimiento de expedición de visados Schengen, suprimiendo la etiqueta adhesiva de visado y ofreciendo la posibilidad de presentar las solicitudes de visado en línea a través de la plataforma de la UE diseñada a tal efecto", dice un comunicado de prensa.
"Hoy estamos llevando la política de visados de la UE a la era digital", afirma Margaritis Schinas, Vicepresidente para la promoción de nuestro modo de vida europeo. "Algunos Estados miembros ya se han digitalizado, pero es crucial que los países de Schengen avancen juntos. Proponemos digitalizar completamente las solicitudes de visado para ofrecer procedimientos de solicitud más fluidos y seguros para los viajeros y los Estados miembros."
"Es esencial que contemos con un procedimiento de visado moderno que facilite los viajes de turismo y negocios a la UE", añade la Comisaria de Interior, Ylva Johansson. La mitad de las personas que viajan a la UE expidiendo visados Schengen consideran que el proceso de solicitud es engorroso, y un tercio de ellas tiene que hacer muchos kilómetros para solicitar un visado. Ya es hora de que la UE ofrezca una plataforma en línea para que los ciudadanos de los 102 terceros países que necesitan un visado de corta duración para viajar a la UE puedan solicitarlo de forma rápida y segura".
La digitalización del proceso de solicitud de visados también debería ayudar a reducir los riesgos que suponen las etiquetas físicas de los visados, que son más fáciles de falsificar y robar, según el comunicado.
La propuesta de la Comisión debe ser examinada ahora por el Parlamento Europeo y el Consejo. Los Estados miembros tendrán entonces cinco años para pasar a la plataforma común de solicitud de visados en línea. El desarrollo de la plataforma podría comenzar en 2024, con vistas a entrar en funcionamiento en 2026. Teniendo en cuenta el periodo de transición de cinco años, todos los Estados miembros podrían utilizar la plataforma en 2031.