Basta con pasear por parís para darse cuenta de ello. La ciudad de la luz ha recuperado a sus turistas, que han venido de todo el mundo, o de casi todo. Las llegadas internacionales por vía aérea sólo cayeron un 10,9% en octubre de 2022, respecto a 2019, según el barómetro de turismo de parís.
“Los turistas estadounidenses volvieron este verano, con un fuerte poder adquisitivo debido a la debilidad del euro frente al dólar”, dice Corinne Menegaux, directora de la Oficina de Congresos y Visitantes de París (OTCP). Esto ha compensado en parte la ausencia de turistas chinos. Los europeos han iniciado su regreso a partir de 2021.
Desde hace varios meses, el sector hotelero se está recuperando, sobre todo porque los eventos y los viajes de negocios están repuntando. A mediados de septiembre, el índice de ocupación de los diez primeros días de octubre superaba el 65%.
Aumento de los precios
Sin embargo, la inflación es fuerte en el sector hotelero. “Los precios siguen subiendo en parís, pero también en otras capitales europeas”, afirma Corinne Menegaux, directora de la oficina de congresos y visitantes de parís (OTCP). Así lo demuestran las cifras de KPMG.
Solo en agosto, parís es una de las ciudades europeas con mayor aumento de tarifas (+28,3% respecto a 2019), por detrás de Fráncfort (+35,6%), roma (+30,8%) y Milán (+30,2%).
El precio medio de una habitación de hotel es ciertamente elevado en el gran parís (154,4 euros), pero sigue siendo inferior al de Londres (192,6 euros), Roma (176,3 euros) o Barcelona (171,1 euros). Y no disuade a los viajeros, por ahora, dice Corinne Menegaux. “No vemos ningún signo de desaceleración de la demanda. De hecho, las perspectivas son muy positivas para la temporada de vacaciones”.
Las “Gueules de Paris" (Bocas de París)
Para estimular la demanda este otoño, la OTCP está preparando la segunda edición de ParisLocal, organizada del 18 al 20 de noviembre de 2022. El objetivo es promover el saber hacer y la artesanía local, sobre todo entre los clientes locales. París también cuenta con embajadores del arte de vivir francés. Son las "Gueules de Paris", que comparten sus pasiones a través de vídeos y podcasts: cocineros, artesanos, panaderos, diseñadores...
Sus testimonios son también una palanca para salir de tópicos como la torre Eiffel, el Moulin Rouge, la baguette y la boina. Aunque estos "clichés" icónicos son y serán siempre parte de la identidad de la ciudad.